En pocos años, no más de diez, se habrán jubilado la inmensa mayoría de los que ahora son trabajadores y emprendedores en muchos pueblos en los que no hay recambio generacional.
Una muerte anunciada.
Pueblos enteros de jubilados.
Ante este panorama la actitud y disposición mental de la mayoría es de absoluta pasividad aceptando como normal una muerte paulatina irreversible.
Más no alcanzamos a ver que los cuidados de una población envejecida e inactiva será la oportunidad de miles de iniciativas emprendedoras y trabajos dependientes de la dependencia.
Será el sector económico, la Economía de los Cuidados, más bollante en estos pueblos, donde el cuidado del prójimo se convertirá en el desempeño más lucrativo.
Atender ancianos y jubilados en sus necesidades.
Se prepara la sociedad para convertirse en una sociedad de cuidados.
Nuestros pueblos se preparan para convertirse en grandes COLIVING SENIOR.
¿Y cuando mueran los cuidados que será de los ciudadadores?