El mes de San Blas, las Aguedas y el Carnaval.
La mofa de las chirigotas entona su canto, cual falla Valenciana, que a los españoles se nos da de lo lindo reírnos del prójimo.
La superficialidad con que abordamos casi todo ha alejado de nuestras vidas un estilo estoico y austero para dar paso al meme continuo. Todo es ridiculizado y satirizado para lograr una mueca en la cara que identificamos con tener sentido del humor.
Nuestros abuel@s lo hacían una vez al año. Nosotros todos los días.
Esta forma de gestionar el buen humor y tratar las noticias y al prójimo crea un sistema neurológico a base de sinapsis en nuestras neuronas gracias a la Neuroplasticidad que constituirá un carácter.
Generalizar y globalizar este carácter supone carnavalizar la vida con gran intensidad.
Las consecuencias son ya evidentes en la manera como tratamos la vida.
La vida es un Carnaval decía la canción.
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